sábado, 19 de diciembre de 2015

Mi experiencia en las prácticas

Creo que no existe profesión más gratificante. 
Cada día, estas personitas inocentes y libres de maldad llegan dispuestas a transmitirnos toda su energía, ilusión y alegría; a decirnos lo guapos que vamos, aunque ese día a nosotros no nos lo parezca; a, desde el primer momento, poner en nosotros toda su confianza, como en una "seño" más. Da seguridad ver como, con pocas palabras, somos capaces de consolarlos, de solucionar sus problemillas, que ellos agradecerán con miles de besos o con un fuerte abrazo. Con solo una mirada o una sonrisa ellos te enseñan a ver las cosas a su manera, con esa imaginación y misterio, como quien está empezando a descubrir y conocer el Mundo.
Solo ellos tienen esa pureza, ingenuidad y ternura. De muy pocos se recibe un cariño tan espontáneo y sincero.
Cada día más feliz y orgullosa de haber elegido ser MAESTRA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario